Partidarios de Medida Opción de Fin de Vida Instan al Comité Conjunto de Salud Pública de Massachusetts Por Su Aprobación

Simpatizantes Brindan Testimonio Emotivo y Convincente Sobre la Necesidad Urgente de Aprobar el Proyecto de Ley

Compassion & Choices y sus partidarios de Massachusetts testificaron hoy ante el Comité Conjunto de Salud Pública en apoyo a la legislación que autorizaria la ayuda médica para morir como una opción de cuidados de fin de vida en el estado. El proyecto de ley, End of Life Options Act u Opciones de Fin de Vida de Massachusetts (H.1926/S.1208), daría a los enfermos terminales, en pleno uso de sus facultades mentales con un pronóstico de vida de seis meses o menos, la opción de solicitar, obtener y auto ingerir un medicamento para morir pacíficamente mientras duermen si el sufrimiento se vuelve insoportable.

La legislación está patrocinada por el Representante Louis L. Kafka y el Senador William N. Brownsberger, así como un total de 69 patrocinadores (más de un tercio de los 200 legisladores), incluida la copresidente del Comité Conjunto de Salud Pública, la Senadora Joanne M. Comerford. Este proyecto fue presentado en la Cámara de Representantes y el Senado el 8 y 14 de enero, respectivamente. La propuesta está basada en la ley Death with Dignity o Muerte con Dignidad de Oregon, que se ha implementado con éxito durante más de 20 años sin registro de abuso o mal uso. Los simpatizantes y las personas que viven con enfermedades terminales de todo el estados asistieron a la audiencia.

Uno de los testimonios fue de Diane Rehm, presentadora del podcast “On My Mind”, producido por la estación de radio pública de Washington, D.C.,  WAMU-88.5 FM, y presentadora durante 37 años del programa de entrevistas The Diane Rehm Show. El esposo de Rehn, John Rehm, de 54 años, murió en agonía en un asilo de personas mayores en Maryland, víctima de la enfermedad de Parkinson.

“Ver a John en los últimos 10 días de su vida me hizo enojar,” dijo Rehm al comité. “¿Por que nuestras leyes impiden la decisión de una persona de morir pacíficamente, cuando la muerte es inevitable en unos pocos meses? … Por favor, aprueben este proyecto de ley”.

El rabino Elias Lieberman de la Congregacion Judia de Falmouth dijo: “Como persona de fe y como persona que eligió una profesión donde se espera ofrecer orientación y apoyo a quienes enfrentan las últimas preguntas existenciales. Creo firmemente que a los adultos terminales, en pleno uso de sus facultades, se les debe dar la opción de morir en paz cuando su sufrimiento hace que la vida sea intolerable”.

“En más de 40 años de experiencia combinada, a través de siete estados y Washington, D.C., no se ha documentado una sola incidencia de abuso o coerción,” dijo Kim Callinan, directora ejecutiva de Compassion & Choices. “Si bien es fácil para los oponentes idear escenarios de casos peores e hipotéticos, las preocupaciones que plantean simplemente no se han confirmado con datos o pruebas. Los enfermos terminales de esta bahía no pueden darse el lujo de interminables deliberaciones, necesitan esta opción compasiva ahora”.

Según la encuesta más reciente, realizada por Purple Insights en 2014, siete de cada 10 votantes de Massachusetts  (71%) apoya una propuesta para permitir “que enfermos terminales, en plano uso de sus facultades mentales, con meses de seis meses de vida, puedan terminar sus días de una manera humana y digna, usando medicamentos recetados que pueden autoadministrarse”. 

Los simpatizantes de la medida End of Life Options Act u Opciones de Fin de Vida de Massachusetts incluyen ACLU de Massachusetts, Boston Ethical Society, Fenway Health/AIDS Action, Greater Boston Humanists, National Association of Social Workers (NASW) Massachusetts y Northampton City Council.

La ayuda para morir está actualmente autorizada en 10 jurisdicciones de Estados Unidos: Oregon (1994), Washington (2008), Montana (2009), Vermont (2013), California (2015), Colorado (2016), Washington, D.C. (2017), Hawai‘i (2018), New Jersey (2019) y Maine (2019). Una vez que las leyes de New Jersey y Maine entren en vigor a finales de este año, más de una quinta parte de la población del país tendrá acceso a esta opción de atención al final de la vida.