La Necesidad de Telesalud Nunca ha Sido tan Grande como Ahora

La pandemia del COVID-19 ha creado una de las transformaciones más grandes del sistema de cuidados de salud: la forma que los médicos tratan a los pacientes por todo el país.

Platiqué esta semana con miembros del National Hispanic Medical Association (NHMA) o Asociación Nacional Médica Hispana durante un seminario web, para resaltar la importancia de la telesalud entre los pacientes vulnerables y de alto riesgo que se encuentran cerca del fin de sus vidas. El seminario web fue parte de la Serie Virtual del NHMA sobre el COVID-19: Sesión 3: Impacto del COVID-19 en la Prestación de Servicios Médicos.

La telesalud, el uso de computadoras, celulares tipo smart o teléfonos de casa para recibir servicios de cuidados de salud en el hogar, se han estado utilizando durante un tiempo, en vez de los servicios en los consultorios médicos.  Dichos servicios han obtenido una gran aceptación recientemente por la pandemia del coronavirus.

La necesidad de la telesalud nunca ha sido tan grande como ahora.

Ayuda a controlar la escasez de médicos y enfermeras, ya que permite que los profesionales de salud con coronavirus que se encuentran en cuarentena dentro de sus hogares, puedan seguir brindando servicios de cuidados paliativos y de cuidados de fin de vida o de hospicio como se le conoce en Estados Unidos. También pueden ofrecer otros servicios por internet a los pacientes dentro del hogar.

La telesalud es particularmente importante para los pacientes que no padecen de COVID-19 y que tienen un diagnóstico médico grave o terminal, porque los mantiene alejados de las salas de emergencia y de los centros de cuidados de urgencias donde podrían infectarse con el virus. 

Estas consultas virtuales cierran algunas de las brechas de acceso a cuidados médicos que han existido entre los latinos/hispanos. Ya no son necesarios los costos de transporte, tiempo fuera del trabajo y las visitas costosas en la sala de emergencias. Asimismo, la telesalud permite que los latinos/hispanos puedan encontrar proveedores médicos culturalmente competentes, que hablen y entiendan bien el español. A pesar de que existe el uso significativo de celulares tipo smart  entre los latinos/hispanos, aún debe haber un mayor acceso de banda ancha que asegure conexiones confiables, cuando se utiliza esta tecnología.

Sabemos con certeza que esta pandemia no va a terminar pronto.

Mientras que los gobernadores están levantando las órdenes de quedarse en casa y los hospitales y sistemas médicos en todo el país están reanudando los cuidados médicos electivos que no son de emergencia, resulta crítico y fundamental cambiar las políticas que determinen la mejor forma de que estos servicios virtuales se sigan proporcionando a futuro.

Los pacientes y sus seres queridos, así como los médicos, están adoptando y apoyando el uso de telesalud cada vez más, así como otros servicios virtuales que brindan cuidados médicos de fin de vida. Los encargados de formular políticas deben extender su apoyo financiero y de políticas para la telesalud durante dicha emergencia de salud pública aún y cuando termine la emergencia. De lo contrario nuestros pacientes más enfermos y vulnerables con cáncer y otras enfermedades incurables, estarán en mayor riesgo de morir de manera dolorosa y prematura.